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¿Cuáles son las técnicas de abdominoplastia más utilizadas?
La abdominoplastia es la técnica quirúrgica que logra eliminar el exceso de grasa y tonificar y mejorar el aspecto del abdomen.
Existen varias técnicas dentro de lo que se refiere a esta intervención. Unas más completas y otras menos, como la miniabdoninoplastia. También con el avance de la ciencia se puede realizar esta operación con endoscopia, como detallaremos a lo largo de esta exposición.
La elección de una técnica u otra dependerá mucho del cuerpo de la persona que se tenga que operar. Hay, como hemos señalado,varias opciones que se pueden hacer solas o conjuntamente. Por eso, se deberá estudiar caso por caso teniendo en cuenta factores como: cantidad de grasa en el abdomen, flacidez de la piel, lugar del ombligo, existencia o no de cicatrices, etc.
BonoMédico ofrece este tipo de intervenciones de abdominoplastia en Barcelona, Málaga, Palma de Mallorca, Madrid, Valencia y Sevilla, entre otros puntos de España, con cirujanos que cuentan con una amplia experiencia en cirugías estéticas.
Las principales técnicas de abdominoplastia empleadas son:
Abdominoplastia
Es la cirugía que se emplea para personas con mucha grasa y piel sobrante en el abdomen. También se la conoce como dermolipectomía abdominal. Se hace en un hospital con anestesia general, y el paciente después permanecerá de 1 a 3 días hospitalizado después de la operación. La operación dura aproximadamente dos horas y media. Si se hace también una liposucción para quitar la grasa de los lados para estrechar la cintura, hay que añadir 45 minutos más.
El cirujano dibuja en el paciente una especie de patrón sobre el que operarará y le servira como referencia. Después hará un corte en la zona alta del pubis, extraerá la grasa y piel que sobre hasta el ombligo. Éste se retira de la piel de alrededor y se deja unido sólo por su inserción honda en los músculos abdominales. Seguidamente el corte llega hasta las costillas y se tira de toda la piel hacia abajo para suturar la cicatriz, cerrándola, y que quede el vientre plano. Por último se coloca el ombligo en su posición corrrecta.
Con el objetivo de mejorar aún más los resultados de esta operación también, a veces, se practica otra técnica para arreglar los músculos rectos abdominales que se encuentran separados en mujeres que han sufrido varios embarazos. Esta técnica se conoce como diástasis de los músculos rectos abdominales y consiste en unir las paredes de dichos músculos como si fuera un corsé para poner firme la zona. También este procedimiento quirúrgico puede hacerse con una liposucción (lipoabdominoplastia), consiguiendo así resultados espectaculares.
En este tipo de cirugía queda una cicatriz más grande. Aunque hay otro método similiar también denominado “Abdominoplastía”con el que queda una cicatriz más corta. Se realiza como la abdominoplastia, pero en pacientes con poca grasa y piel en el abdomen. El cirujano quita una elipse de piel y grasa, pero sin llegar hasta el ombligo. El corte alcanza las costilas, parar mejorar y unir los músculos abdominales. La piel se lleva hacia abajo para conseguir que quede el vientre plano y se cose el ombligo, otra vez, a la musculatura de la pared abdominal. Este método está indicado para pacientes que tengan el abdomen abultado tras un embarazo
Miniabdominoplastia
Como su nombre indica es una cirugía “mini”, similar a la practicada con la abdominoplastia. En este caso, se elimina una elipse pequeña de piel y grasa en la zona alta del pubis, pero sin tocar la piel aledaña del ombligo ni los músculos más hondos.
Este tipo de cirugía se aplica a pacientes, que no sufren una separación del músculo aunque acumulen pequeños excesos de grasa y piel en el abdomen bajo. El resultado es muy bueno, aunque quede una cicatriz muy pequeña, que se puede disimular perfectamente con ropa de baño o bikini. Esta técnica se puede realizar de forma ambulatoria, con anestesia local y sedación.
Cirugía endoscópica
Esta técnica es utilizada para llevar a cabo una cirugía más sencilla del abdomen. Los endoscopios son pequeñísimas cámaras que se insertan en la piel mediante cortes muy pequeñitos. Se enganchan a un monitor de vídeo durante la operación, permitiendo al cirujano ver lo que está haciendo dentro del paciente. Así, el médico quita el exceso de grasa utilizando otras herramientas pequeñas que se introducen con otros cortes pequeños.
Postoperatorio
En el quirófano se le coloca al paciente drenajes (tubos planos para evacuar líquidos de la incisión) y una faja que tendrá que llevar un mes. También se le aconsejará reposo durante los quince días posteriores a la operación y no hacer tareas ni esfuerzos físicos.
En el caso de la abdominoplastia (tanto la estándar como la de la cicatriz corta) el paciente tendrá que pasar más de una noche en el hospital. Durante ese tiempo se le administrará calmantes para el dolor de forma intravenosa y fluidos y tendrá todo el apoyo y ayuda, que necesite para recuperarse, durante las primeras 24 horas después de la cirugía.
En el caso de los drenajes, si son necesarios se tendrán de cuatro a siete días después de la operación. Por lo general no hay suturas que quitar, en el caso de que existan otros niveles de auto absorción de costuras bajo la piel. Las suturas que quedan fuera se recortan pasados de siete a diez días.
Una vez que el paciente este en casa, además de reposar, será importante que empiece a moverse poquito a poco alrededor de su casa, con el fin de acelerar el proceso de recuperación y disminuir el riesgo de formación de coágulos en las piernas. El cirujano podrá recetarle medicamentos de prevención de coágulos después de la operación.
Recuperación total
La persona operada necesitará que alguien lo cuide, familiar o amigo, durante al menos los cinco primeros días de la operación. La total recuperación puede llevar semanas y será más rápida en aquellos pacientes que antes de ser operados tenían un estado de salud muy bueno y unos músculos abdominales fuertes.
Aunque la recuperación total dependerá de cada paciente, por lo general, la mayor parte de estos se reincorporan al trabajo después de tres o cuatro semanas de la cirugía. El ejercicio físico ayudará a recuperarse antes.
Por lo pronto, la inflamación y la sensibilidad mejorarán a partir de los seis meses. Este tiempo coincide con la mejora de las cicatrices. En total deberá pasar un año para una mejora más definitiva y ver si se requiere de alguna rectificación del proceso. A veces, los médicos aconsejan un microliposucción encima de la cicatriz y debajo del ombligo para igualar el volumen de la parte baja de este.