Con esta abdominoplastia en Zaragoza por solo 4.105 € en lugar de 5.900 €, por fin podrás tener el cuerpo que siempre has querido.
La abdominoplastia es una intervención quirúrgica que busca eliminar el sobrante de piel y grasa de la parte media y baja del abdomen y reforzar la musculatura de la zona. Está indicada en aquellos casos en los que no es suficiente con una liposucción, y es especialmente útil en mujeres que han tenido varios embarazos, tras los cuales la piel y los músculos abdominales se han relajado y no han recuperado su tono inicial. La abdominoplastia es una intervención sencilla, de corta duración (entre una y tres horas) que se realiza con anestesia general. Tras una breve hospitalización, el paciente regresa a casa y recupera de manera rápida su ritmo habitual de vida.
Si te interesa esta operación, deberás acudir a la consulta previa incluida en el bono con el especialista. Él te atenderá y estudiará tu caso. La operación se realiza en Zaragoza.
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La abdominoplastia en Zaragoza es una intervención quirúrgica con la que se logra eliminar el exceso de tejido adiposo del abdomen, con el objetivo de proporcionar una mejor apariencia física a las personas que tienen el vientre flácido. Por tanto, esta cirugía tiene un carácter fundamentalmente estético y afecta tanto a los músculos como a la piel que conforman la pared abdominal.
Es importante comprender en qué consiste la abdominoplastia para no confundirla con otras técnicas similares como la liposucción. Hay ocasiones en que un paciente acude a la consulta del cirujano plástico para pedir información acerca de la liposucción cuando, en realidad, su problema requiere de una cirugía abdominal. En este sentido, es importante establecer las diferencias entre liposucción y abdominoplastia, sabiendo que ambas técnicas son complementarias en algunos casos.
En general, seguir una dieta saludable y equilibrada y practicar ejercicio, suele ser una buena combinación para mantener a raya la grasa abdominal. Sin embargo, hay personas para quienes esto no es suficiente. Para estos pacientes, la abdominoplastia puede ser la mejor solución.
Con la cirugía de abdominoplastia en Zaragoza se pone fin a las acumulaciones grasas en el área abdominal.
De este modo, el exceso de grasa en el abdomen es la principal razón por la cual muchas personas deciden hacerse una abdominoplastia. Asimismo, esta acumulación de grasa se puede producir por diversos motivos, fundamentalmente:
De todos modos, el médico intentará recurrir a otras vías antes de recomendar al paciente una abdominoplastia en Zaragoza. Por ejemplo, un buen comienzo sería llevar una dieta equilibrada y realizar algún tipo de actividad física, ya que mediante estos métodos más saludables también puede lograrse un mayor tono muscular del vientre.
La abdominoplastia es una técnica quirúrgica de marcado carácter estético, puesto que su principal finalidad es la de proporcionar una mejor apariencia del abdomen y del contorno corporal en su conjunto.
En primer lugar, las personas que se someten a esta intervención procuran alcanzar una mayor tonificación en el área abdominal, es decir, la piel se tensa y adquiere mayor firmeza, al tiempo que descarta futuras anomalías derivadas de la piel flácida sobrante. En la mayoría de los casos, estos pacientes han optado anteriormente por otras técnicas, aunque sin éxito.
Si bien, aunque la principal motivación para hacerse una cirugía abdominal sea la estética, tampoco hay que restar importancia al factor psicológico y al efecto positivo de esta intervención sobre la autoestima. Asimismo, en muchos casos (especialmente cuando se trata de personas que han perdido una gran cantidad de peso) eliminar el exceso de piel puede responder también a una cuestión de salud y bienestar.
Esta operación consigue eliminar la piel que sobra, esa que tiende a caerse sobre la pelvis y que afea la figura corporal.
Hay que aclarar que la cirugía abdominal no está indicada para personas que necesitan perder peso, sino para quienes tienen un problema de flacidez en la piel y de grasa localizada. Un buen candidato para la abdominoplastia suele ser una persona que esté en su peso adecuado y se encuentre en buen estado de salud, independientemente de su sexo. Después de una primera valoración médica, el especialista dirá si esta es la mejor técnica o si debe acudir a alguna otra alternativa para acabar con la flacidez del estómago, así como con las estrías.
Se debe puntualizar que, en el caso de las mujeres, se recomienda someterse a la cirugía abdominal una vez que hayan decidido no tener más hijos, pues un nuevo embarazo podría alterar los resultados.
En la otra cara de la moneda, determinadas personas no pueden considerarse candidatas ideales a la práctica de una cirugía de abdominoplastia:
Los motivos estéticos son los que fundamentalmente impulsan a los pacientes a realizarse esta operación.
Para el preoperatorio de la absominoplastia el paciente debe realizarse una serie de pruebas y análisis médicos, y tiene que compartir con el cirujano cuáles son sus expectativas con relación a los resultados. Además, es importante que se informe tanto de los beneficios, como de los posibles efectos secundarios y riesgos de esta cirugía.
Asimismo, si se está siguiendo algún tratamiento hay que comunicárselo al especialista antes de la intervención, para que indique si hay que dejar de tomar el medicamento o si no supone ningún problema. Del mismo modo, hay que asegurarse de que el paciente no es alérgico a los fármacos que se usarán con la anestesia.
Si la persona es fumadora, se recomienda dejar este hábito antes de la abdominoplastia en Zaragoza y no fumar tampoco después, pues el tabaco dificulta la correcta cicatrización.
Hay algunos datos básicos con relación a la cirugía abdominal que resulta de interés conocer. Por ejemplo:
Una vez que la anestesia haya hecho efecto, el médico realizará un corte en el abdomen, justo en la línea del bikini, situada encima del pubis.
Además de esto, cabe explicar brevemente ¿cómo se realiza la abdominoplastia en Zaragoza? Son varios los pasos, así, en primer lugar se hace una incisión longitudinal en la parte baja del abdomen, de una cadera a otra; y después se realiza otra alrededor del ombligo, desde donde se empieza a extraer la grasa del abdomen. El objetivo principal de esta ciurgía es tensar los músculos, algo que el cirujano hace uniéndolos con una especie de grapas hasta darles la tersura deseada. Así se logra que el vientre esté más plano y que el contorno corporal tenga una apariencia más estilizada.
En cuanto al exceso de piel que sobra, el cirujano la elimina mediante cortes en las zonas donde sea necesario. Asimismo, si el paciente tiene exceso de grasa a los lados (las llamadas 'llantas'), se eliminarán haciendo cortes más pequeños para sacar la grasa que se ha acumulado en esa zona.
La abdominoplastia en Zaragoza arroja unos magníficos resultados siempre que se sigan las indicaciones médicas pertinentes.
Tras finalizar la cirugía, el médico realizará suturas en las incisiones que ha realizado y, en algunas ocasiones, colocará una especie de tubo para que el líquido que resulte de la operación se drene y no quede dentro del paciente. En cuanto a la cicatriz, se notará, pero con el paso de los días será menos visible para el paciente, por lo que no debe ser una preocupación para él.
En términos generales, la operación es muy sencilla, nada complicada y sin riesgos para el paciente, pero se deben seguir todas las indicaciones que dé el personal médico para que la recuperación resulte todo un éxito.
Otra posibilidad para extraer la grasa excedente del abdomen es la cirugía de mini abdominoplastia. La principal característica que la distingue de la abdominoplastia tradicional es que en este caso la mini abdominoplastia se centra únicamente se trata la parte inferior del vientre, es decir, la situada bajo el ombligo.
El proceso de recuperación del paciente depende tanto de sus características físicas como del estado de salud que presente. De esta manera, el periodo postoperatorio será más o menos largo.
Al inicio, es habitual sentir molestias o dolor en el abdomen, que se pueden aliviar con analgésicos prescritos por el cirujano. Si el dolor persiste o se intensifica, lo más recomendable es comunicárselo al especialista lo antes posible.
La rutina se irá recuperando conforme pasen los días, de forma progresiva, aunque normalmente deben pasar 20 días para volver al trabajo siempre y cuando la actividad laboral no requiera muchos esfuerzos. En cuanto a las cicatrices, estas se irán haciendo cada vez más imperceptibles, conforme el tiempo de recuperación avanza. No obstante, hay que subrayar que las cicatrices son permanentes.
Es cada vez más común que los hombres opten por esta cirugía para lograr un abdomen más firme y unos músculos más delineados.
En los últimos años, muchos hombres han recurrido a la cirugía abdominal para poder deshacerse del exceso de piel que tienen en determinadas zonas del cuerpo.
Una de las principales ventajas que tienen los hombres en esta operación es que, por naturaleza, tienen más definida el área del abdomen, por lo que los resultados son más visibles, más estéticos y mejor delineados.
Pese a que a priori puede considerarse una intervención exclusivamente femenina, cada vez más hombres se decantan por ella.
En el caso de que el hombre interesado en la abdominoplastia tenga un exceso de peso, el médico establecerá una dieta baja en grasas y practicar algún tipo de ejercicio antes de someterse a la intervención. En cuanto a cómo se realiza la operación de abdominoplastia en Zaragoza, es el mismo procedimiento que se ha descrito anteriormente.
Ante cualquier duda sobre la abdominoplastia, es muy importante acudir a un médico que tenga experiencia en esta cirugía para que le explique en qué consiste la operación, así como cuáles son los principales riesgos.
Una vez finalizada la intervención, los resultados alcanzados resultan bastante satisfactorios. El entorno corporal se hace más esbelto y el aspecto de firmeza se vuelve notorio, de forma que la autoestima mejora considerablemente.
Los resultados que se obtienen con la abdominoplastia en Zaragoza son permanentes, siempre y cuando la persona siga unos hábitos de vida y alimentación saludables. Por ello, hay que ser conscientes de que determinadas situaciones pueden afectar de nuevo a la firmeza del abdomen como, por ejemplo, si se pierde o gana peso de forma brusca.
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