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La Rinoplastia es una intervención quirúrgica que trata de resolver problemas estéticos de la nariz, logrando la armonía en el rostro del paciente.
En la visita previa gratuita, el especialista te atenderá y te comentará todos los detalles de la operación. Además, decidirá la técnica más adecuada para tu caso concreto con el fin de lograr el mejor resultado posible. Reserva sin compromiso, recuerda que acudir a la consulta no te obliga a someterte a la intervención, que se llevará a cabo en Hospital Mediterráneo.
La Clínica Mediterráneo es un centro médico privado de referencia en la provincia de Almería, dotado con los mayores avances tecnológicos. Cuenta con 5 quirófanos generales perfectamente equipados y 86 habitaciones.
Ubicado frente al mar en la urbanización de Nueva Almería, el hospital se encuentra situado en una zona de expansión con un acceso cómodo y rápido.
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La rinoplastia en Almería es una intervención quirúrgica que modifica la forma de la nariz, y que puede aumentar o reducir su tamaño y el de los orificios nasales, además cambiar la configuración y el ángulo que existe entre la nariz y el labio superior. Se suele realizar por motivos estéticos pero también para corregir malformaciones congénitas, solucionar problemas ocasionados por traumatismos, corregir problemas respiratorios... En el caso de que se intervenga sobre el tabique nasal para mejorar la respiración se habla de rinoseptoplastia.
Sobre la edad recomendable realizarla, se aconseja hacerlo a partir de los 18 años ya que antes puede haber cambios fisiológicos, y además a edades más tempranas las personas suelen tener mayor inestabilidad psicológica.
La rinoplastia en Almería es una cirugía que modifica la forma y el tamaño de la nariz.
En definitiva, la rinoplastia se puede realizar en cualquier persona que desee mejorar la estética de su nariz y de su cara, pero es importante valorar que tenga una salud adecuada y que no padezca ninguna enfermedad que contraindique la intervención.
Previamente a la realización de una rinoplastia se realiza un examen médico exhaustivo. Es importante para el paciente seguir las indicaciones que le dé su especialista, así se evitarán riesgos y complicaciones en la operación. Es muy aconsejable plantear en la primera consulta todas las dudas que tenga e informarse sobre todas las cuestiones relativas a la intervención.
La rinoplastia en Almería se suele realizar bajo anestesia general aunque en determinadas ocasiones se usa la anestesia local con sedación. Suele durar entre 1 y 2 horas. Sólo en casos complejos la cirugía dura más. La vía de abordaje usada es el interior de la nariz por lo que no queda cicatriz visible. El cirujano plástico actúa sobre el hueso y cartílago de la nariz y los remodela hasta conseguir la forma deseada.
La rinoplastia se realiza con anestesia general y suele durar entre 1 y 2 horas, aproximadamente, únicamente en casos aislados la intervención se alarga más tiempo.
Tras la intervención se coloca una férula de escayola para ayudar a mantener la forma conseguida. También se colocan unos tapones nasales para prevenir y controlar las posibles hemorragias. Como consecuencia de la intervención es normal que aparezcan hematomas, molestias y dolores en la zona tratada, para lo cual son eficaces los analgésicos y antiinflamatorios.
En unos 7-10 días se retira la escayola, pero todavía no se podrá apreciar una mejoría clara. El aspecto de la nariz tras la rinoplastia va mejorando poco a poco. El especialista dará los consejos necesarios para el cuidado de las cicatrices, como por ejemplo evitar el sol, además recomendará guardar reposo y evitar movimientos bruscos o grandes esfuerzos físicos.
Los resultados de la rinoplastia en Almería son unos resultados muy buenos, mejorando la estética de la nariz y del conjunto de la cara. Generalmente, los pacientes se sienten muy satisfechos con el aspecto estético de su nariz tras esta cirugía, aumentando su seguridad y autoestima.
Uno de los riesgos más habituales de esta operación son las hemorragias, aunque si se abordan de forma adecuada no tienen por qué suponer mayor complicación. Así, el sangrado que tiene lugar tras la rinoplastia en Almería suele desaparecer rápidamente y no supone ningún problema mayor.
Lo importante, como en toda hemorragia, es localizar el punto sangrante, limpiando las fosas nasales a conciencia, incluso recurriendo al aspirador para eliminar los coágulos situados en zonas profundas. De ser muy copiosa, se procederá al taponamiento momentáneo con algodón o gasa empapado en solución con acción vasoconstrictora que facilite la exploración.
Para evitar complicaciones durante la recuperación, el paciente debe seguir todas las indicaciones del cirujano.
El taponamiento puede hacerse también con balones de goma que se sitúan en la fosa nasal vacíos y luego se llenan de aire a presión, con lo que se adaptan perfectamente a los accidentes anatómicos ejerciendo una presión uniforme en todos los puntos: la extracción de estos balones, una vez vaciados, no presenta problemas de ninguna especie.
La operación de rinoplastia en Almería puede solucionar numerosas patologías de las fosas nasales aunque normalmente no se suele utilizar para tratar problemas que afectan a las mucosas como los que se describen a continuación.
La mucosa nasal posee un sistema vascular de excepcional complejidad y riqueza, buena parte de cuyos elementos tienen paredes físicamente endebles y biológicamente frágiles, susceptibles de desgarrarse con facilidad y dar lugar a hemorragias que por su intensidad o duración en ocasiones crean problemas muy serios. Tales hemorragias unas veces son producidas sin causa aparente, otras son sintomáticas de procesos locales o generales, o sobrevienen tras traumatismos accidentales o quirúrgicos.
Después de la intervención, se coloca una escayola en la nariz para que mantenga su nueva forma y se taponan los orificios para evitar posibles hemorragias.
Se produce por erosión o rotura de la pared vascular de una rama arterial, o de una red de capilares. Según la cuantía de la pérdida de sangre y de su duración, cabe distinguir tres variantes:
Las hemorragias son algunos de los riesgos más comunes de la rinoplastia en Almería.
Aparece generalmente de forma brusca en adolescentes o jóvenes en plena salud. En estos casos, la sangre gotea de un solo orificio nasal o por ambos y puede llegar a ser un sangrado copioso. No obstante, pese a la espectacularidad de la situación, la pérdida real de sangre es pequeña.
La primera de ellas es una hemorragia clásica de las personas hipertensas, a partir de ciertas edades. Suele aparecer de forma súbita y si no se procede de inmediato a taponar las fosas nasales, la pérdida de sangre puede ser importante. En ocasiones, puede dar lugar a vómitos con coágulos.
Por otro lado, las hemorragias graves por reiteración pueden darse en individuos de cualquier edad, y se caracterizan por episodios de sangrado por ambas fosas nasales, de pocas gotas, que cesan y se vuelven a repetir a las pocas horas. Un leve traumatismo (al sonarse la nariz, estornudar o toser) puede provocar una rotura vascular que desencadene una hemorragia de este tipo.
La rinoplastia en Almería no supone una solución para ninguno de estos problemas, pero tampoco supondrá un perjuicio para estos pacientes. Lo recomendable es quienes desean someterse a la cirugía de nariz informen al cirujano si sufren alguna de estas patologías, para que el especialista tenga en cuenta este dato de cara a la intervención.
De carácter recidivante y benigno, se da en ausencia de cualquier perturbación anatómica o funcional del sistema vascular. En niños y adolescentes puede suceder tras realizar esfuerzos o cuando están a pleno sol, y en el caso de las niñas es posible que se de en la fase premenstrual. En estos casos suele haber un solo punto sangrante.
Por último, hay que referirse brevemente a las hemorragias producidas por traumatismos. En estos casos la cirugía de nariz puede servir para revertir el daño causado por un el traumatismo. Dentro de este grupo cabe distinguir entre:
En definitiva, la rinoplastia en Almería está recomendada para numerosas patologías nasales como desviaciones del tabique nasal, crestas pronunciadas, dificultades respiratorias, perforación del tabique por consumo de ciertas sustancias, etc. Para ello existen muchas técnicas, como la utilización de injertos del propio paciente. Cualquier persona que desee cambiar o mejorar el aspecto de su nariz, o resolver algún problema nasal, debe acudir a un especialista que estudie su caso personalizado y recomiende el mejor tratamiento posible.
Bibliografía:
Aviso: esta página contiene artículos de contenido médico y sanitario pero en ningún momento debe tomarse como guía exclusiva para un problema de salud. Para cualquier duda sobre un problema de salud debe acudir al especialista. BonoMédico no es un consultorio médico.
