Contenidos
Cada vez son más los hombres que deciden someterse a un injerto capilar para frenar la caída del cabello y cada vez son más los famosos que recurren a esta técnica y que, además, después hacen públicos los datos de sus tratamientos. Es una forma de naturalizar este tipo de tratamientos en la sociedad. Entre los futbolistas de élite también está cada vez más extendido acudir a una clínica para recuperar el pelo. En España, uno de los casos más comentados en los últimos años es el injerto de pelo de Iker Casillas, considerado uno de los mejores porteros del mundo, a quien la caída del cabello o alopecia tampoco perdonó.
El caso del injerto de pelo de Iker Casillas
El ex del Real Madrid se practicó un injerto capilar antes de la Eurocopa de 2012. Según publicaron varios medios nacionales, entre ellos el suplemento La Otra Crónica, del diario El Mundo, Casillas acudió a una clínica madrileña cercana al Santiago Bernabéu para realizarse un microinjerto capilar a través de la técnica FUE de extracción de unidades foliculares, el más avanzado de los procedimientos y consistente en coger uno a uno los folículos pilosos del área donante de la cabeza -occipital y lateral- para después implantarlos en las zonas a repoblar.
El de Iker Casillas es uno de los muchos casos de injerto de pelo que se vienen sucediendo.
Según el medio antes citado, Casillas habría pagado unos 7.000 euros por la intervención y fue esta la causa por la que jugador acudió con el rostro algo inflamado a un partido benéfico, un hecho sobre el cual se especuló mucho entre aficionados y periodistas. Los resultados del injerto demostraron ser tan exitosos que, después de someterse a esta técnica, Casillas ha sido escogido incluso como imagen por alguna que otra marcha de champús para presumir de cabello sano en sus anuncios de televisión.
Otras estrellas del fútbol con injerto capilar
Si hay que mencionar otro deportista famoso cuyo pelo ha sido casi tan comentado como sus habilidades desde el banquillo, ese es el técnico del Atlético de Madrid, el “Cholo” Simeone, quien en su momento tuvo que ocultar su calva con preocupación pero después recuperó su pelo habitual, parece ser que gracias a un injerto de pelo. También el defensa español Jesús Gámez consiguió hacer desaparecer por completo sus entradas con un trasplante capilar de una sola intervención en la que se le implantaron 3.480 unidades foliculares -6.866 cabellos-, según informó más tarde la clínica encargada. Fuera del terreno de juego, aunque relacionado con el mundo del fútbol, el periodista deportivo Paco González también admitió en una entrevista haberse hecho no solo uno, sino dos injertos de pelo para mejorar su imagen.
Al margen del injerto de pelo de Iker Casillas, y más allá de nuestras fronteras, estrellas como David Beckham, uno de los deportistas más cotizados a nivel mundial -no solo en el césped sino también como imagen de múltiples campañas publicitarias- también ha recurrido a esta técnica. En su caso, a sabiendas de que la imagen es importante -más aún en el ambiente en el que él se desenvuelve-, en cuanto comenzó a perder cabello, no dudó en someterse a un injerto de pelo que, visto el resultado y el aspecto totalmente natural, fue un éxito.
Otro caso a destacar es el de Wayne Rooney, el jugador del Manchester United, que a los 25 años se sometió a una operación para implantarse pelo. Según publicaron algunos medios como el diario El País, la intervención le costó unas 30.000 libras -cerca de 34.000 euros- y fueron unas ocho sesiones. El propio futbolista lo contó en su cuenta de Twitter con el siguiente mensaje acompañado de una foto: “Me estaba quedando calvo a los 25, ¿por qué no hacerlo?”.
Detalles de la técnica FUE
La técnica FUE de extracción de unidades foliculares es el tratamiento más avanzado en materia de implante capilar. Esta permite obtener los folículos uno a uno, de manera individual, a través de un instrumento quirúrgico de unos 0,8 milímetros de diámetro conocido como ‘sacabocados’ y que puede utilizarse de forma manual o automática. Una vez extraídas las unidades foliculares necesarias, se preparan para trasladarlos a las zonas calvas del cuero cabelludo, injertando uno a uno los folículos pilosos, para que el pelo injertado crezca desde la raíz de forma natural.
Como en otras técnicas de injerto de pelo, con la FUE se usan como zonas donantes la nuca y los laterales de la cabeza, de donde se pueden llegar a obtener aproximadamente unas 2.000 unidades foliculares. El tratamiento podría llegar a durar más de 10 horas, por lo que el médico cirujano y el paciente pueden acordar realizarla en una o dos sesiones. Una de las ventajas de este procedimiento es que, al no usarse bisturí ni tener que suturar o poner puntos, el proceso de cicatrización es mucho más rápido. La anestesia que se emplea para el trasplante de pelo siempre es local, por lo que la intervención es indolora, y solo en los casos en los que el paciente presenta síntomas de ansiedad se le administra alguna sedación para tranquilizarlo.
Al igual que Casillas, numerosas estrellas del celuloide también se han sometido a un injerto de pelo.
En definitiva, es bueno saber que el tratamiento se lleva a cabo con carácter ambulatorio y el paciente puede volver a casa el mismo día. Así, el paciente se recupera a nivel médico después de un implante capilar a las 24 horas y se puede reincorporar a su trabajo y hacer vida normal en unos siete días, salvo que esto implique realizar una actividad física intensa o que le provoque un sudor excesivo, como en el caso del injerto de pelo de Iker Casillas o cualquier otro deportista, en cuyos casos se suele recomendar un reposo de al menos 15 días antes de practicar deporte o realizar ejercicios y movimientos bruscos.
La técnica FUE de extracción de unidades foliculares es el tratamiento más avanzado en materia de implante capilar.
El otro método empleado para un injerto capilar es la técnica FUSS o de la tira, que se practica extrayendo los pelos de la zona donante mediante una fina banda de piel, aproximadamente de unos 20 cm de longitud y un centímetro de ancho, para implantarlos después en las partes despobladas. Si bien, al igual que en el anterior procedimiento, los riesgos son mínimos, cabe destacar que este proceso requiere la sutura de las zonas implicadas, por lo que su recuperación será un poco más tardía. Los puntos se retirarán a los 12 días aproximadamente, tras lo cual quedará una pequeña cicatriz que será estéticamente invisible siempre que el pelo circundante tenga una longitud mínima cinco milímetros.
Riesgos de un injerto de pelo
Se utilice la técnica de la tira o la FUE -como es el caso del injerto de pelo de Iker Casillas-, las posibles complicaciones de un trasplante de cabello son muy reducidas. No obstante, si usted se está planteando la posibilidad de someterse a uno de ellos, siempre será aconsejable que las conozca previamente.
Cicatrices
Una amplia cicatriz situada en la nuca es una de las consecuencias de emplear la técnica de la tira -o técnica FUSS-. Por norma habitual, el cirujano utiliza el cierre tricofítico que conserva intactos tanto los bulbos capilares como sus pelos en toda la extensión de la herida. Posteriormente, se unirá utilizando un específico procedimiento de cierre.
Si no se presentan complicaciones y se consigue el objetivo deseando, el cabello nacerá de la propia cicatriz de modo que esta permanecerá casi imperceptible a la vista.
Sin embargo, siempre cabe la posibilidad de que se produzca una cicatrización inadecuada. Aparte de la habilidad y experiencia del cirujano, tendrá un peso fundamental la calidad de la piel del paciente para su cicatrización. Como también lo es que este cumpla las indicaciones sugeridas en relación a no practicar deporte ni efectuar movimientos repentinos. Hasta deberá guardar especial precaución al flexionar la cabeza para amarrarse los cordones o leer.
Infecciones
En contadas ocasiones una intervención de implante capilar conlleva riesgos o complicaciones.
Si bien es cierto que en cualquier operación de cirugía existe determinado riesgo de padecer infecciones, en el caso concreto que nos atañe, el del injerto de pelo de Iker Casillas y de cualquier otro paciente, es ínfimo. De hecho, se presenta en menos de uno de cada cien casos. Además, su tratamiento tampoco revestiría excesiva dificultad, pues estaría basado en una buena higiene y en la administración de antibióticos.
Inflamación
Hay determinadas ocasiones en las que los pacientes sometidos a un trasplante capilar experimentan una pequeña inflamación en la frente o en los párpados. Esta suele iniciarse al poco tiempo de finalizar la intervención y se extiende durante un par de días -tres como máximo-. El motivo que origina la inflamación lo encontramos en la infiltración local de anestésicos. Con la finalidad de impedir que esto suceda, es necesario descansar y dormir en postura semisentada.
Trastornos de la sensibilidad
Una vez cortada la tira de cuero cabelludo, pueden producirse lesiones nerviosas en ese área, lo cual conduce a una ausencia eventual de sensibilidad. El lapso de tiempo durante el que se extiende esta sensación de la piel oscila entre un intervalo de tres meses y de año y medio. Aunque podría aparecer asimismo en el área de recepción, también en este caso el efecto es pasajero.
No obstante, el riesgo más severo de un trasplante de pelo viene determinado por el hecho de que la cantidad de injertos viables sea inferior a la que en un principio se presuponía, alrededor del 70% de esta. En la actualidad, lo más habitual es que sobreviva aproximadamente el 90% de las unidades foliculares que se han implantado.
El injerto de pelo en Turquía
El injerto de pelo en Turquía es una de las intervenciones más practicadas en dicho país. Y su ciudad más importante, Estambul, alberga una gran cantidad de personas que presentan problemas de calvicie y que desean solventar. De hecho, son numerosos los españoles que se desplazan hasta allí para alcanzar una solución a su alopecia. Esto se debe a los diversos beneficios que los cirujanos otomanos ofrecen a los demás países europeos -sobre todo a España-, lo que le confiere un especial atractivo turístico para tal fin.
El principal detalle diferenciador viene determinado por el coste del trasplante. A grandes rasgos, el precio de un injerto de pelo en Turquía es del 50% -incluso inferior- respecto al de las ciudades españolas más destacadas. Así, en Estambul, una intervención quirúrgica en su totalidad supondría únicamente unos 2.500 €, motivo más que suficiente para que no pocos hombres se interesen por los servicios que allí se ofertan y soliciten mayor información acerca de los mismos.
La técnica FUE de extracción de unidades foliculares es la que se emplea con más asiduidad y se realiza mediante la extracción de folículos del área posterior de la cabeza para después injertarlos en la zona alopécica. Es decir, a simple vista, el procedimiento es exactamente el mismo. Además, existe la opción de emplear un dispositivo motorizado que favorezca la intervención y reduzca la duración de la cirugía.
Son muchos los españoles que viajan hasta Turquía para poner fin a su calvicie.
¿Cómo son sus cirujanos capilares?
En el caso de que se decida por una clínica de garantías y un diestro cirujano, tanto la clase de anestesia como su modo de administración son idénticos a los europeos. No se debe obviar que, en la actualidad, se dispone de una gran cantidad de información relativa a los especialistas médicos, a la cual se puede acceder desde cualquier parte del mundo. De este modo, el injerto de pelo en Turquía se valorará fundamentalmente por la habilidad del cirujano y la clínica en la que se lleva a cabo, al igual que sucedería en cualquier ciudad de España.
Usted podrá viajar a Turquía con total tranquilidad para someterse a ese injerto de pelo.
Por lo tanto, el primer y decisivo paso será constatar que el cirujano posee la formación necesaria, que se encuentra especializado en procedimientos de este tipo y que cuenta con una dilatada trayectoria en los mismos. Una buena medida sería buscar referencias y equipararlas a las de otras clínicas. Con las disparidades detectadas se podrán extraer las pertinentes conclusiones personales.
Ingreso clínico y recuperación
Esta operación no precisa pasar la noche en el hospital, de modo que podrá regresar al hotel tras ella. A la zona de la cual se han extraídos los folículos se le aplicará un tratamiento de silicona líquida para que pueda realizar sus actividades habituales e impedir que se produzcan infecciones. Es decir, no resulta preciso vendar el área tratada. Sí es más habitual usar una gorra o un sombrero para salir a la calle.
La primera noche después de la intervención genera algunas molestias. Es recomendable dormir sin que el área afectada contacte con ninguna otra superficie, ya que provocaría dolor. No obstante, a lo largo del primer día, estas incomodidades son perfectamente normales. A partir de las 72 horas se reducen sustancialmente. La última de las sugerencias respecto al postoperatorio del injerto de pelo en Turquía versa en torno a no rascarse la cabeza ni a frotársela con toallas.
|
|