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La otoplastia es una intervención quirúrgica en la que se resuelven deformidades de las orejas, ya sean orejas separadas, prominentes, de soplillo, en asa, o incluso la ausencia de ellas. Es una intervención muy común y muy sencilla, con un postoperatorio rápido.
En la primera visita en Clínica Esbeltia te atenderá el Dr. José Miguel Ingelmo Calvo para que resuelvas todas tus dudas. Estudiará tu caso y comprobará la viabilidad de la operación, decidiendo la técnica más adecuada a emplear. La cirugía se llevará a cabo en %%cirugia0%%, en Málaga. Recuerda que la reserva del bono no te compromete a someterte a la intervención.
El Dr. José Miguel Ingelmo Calvo es especialista en Cirugía Plástica y Estética desde 1995. Formación de especialidad en el Hospital Carlos Haya de Málaga.
Clínica Esbeltia nace con la firme voluntad de posicionarse como el Centro Médico Estético de referencia en el sector, ofreciendo la más alta calidad en todos sus servicios, y al mejor precio posible. Todo ello, sin condicionar a sus pacientes con compromisos de continuidad a largo plazo. El éxito de sus tratamientos se basa en la alta calidad de sus profesionales, equipamientos tecnológicos e instalaciones.
El origen de Clínica Esbeltia está en un grupo empresarial sanitario con más de veinte años de experiencia en el sector de la salud privada malagueña. Desde sus orígenes, este grupo empresarial está acostumbrada a contar con clientes muy fieles, pero exigentes. Conoce nuestro centro en clinicaesbeltia.es
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La intervención de otoplastia en Málaga es una cirugía que tiene como objetivo corregir anomalías o deformaciones en las orejas, tanto por su forma como por su tamaño. Con esta intervención se consigue dotar a estas de un aspecto más proporcional con respecto a la cabeza y de mayor armonía con relación al rostro. Siempre sin alterar la naturalidad del resultado.
Entonces, ¿qué es una otoplastia? Se trata de una cirugía realizada con una técnica muy sencilla que logra modificar la posición y dar una nueva forma a las orejas. Sus beneficios no so solo estéticos, sino que también se perciben sobre el autoestima del individuo. En la mayoría de los casos se actúa sobre las dos orejas, aunque también puede intervenirse solo en una si la otra no necesita corrección alguna.
Las principales anomalías que son objeto de corrección son las orejas despegadas del cráneo, llamadas en asa o en soplillo, y las que tienen un tamaño excesivamente grande en proporciones al resto de la cabeza.
Pero, además de lo anterior, la otoplastia también ayuda a solucionar otros problemas en las orejas que son menos frecuentes pero que suelen repercutir negativamente en la salud emocional de las personas y en su autoestima. Algunas de estas anomalías que se pueden citar son las orejas contraídas, las orejas en copa, los lóbulos alargados o incluso los lóbulos rotos o rasgados.
La otoplastia en Málaga es una cirugía perfectamente indicada en niños a partir de los 6 o 7 años de edad.
Asimismo, mediante esta técnica de la otoplastia en Málaga también sirve para tratar los casos de microtia (cuando la persona nace sin oreja, es demasiado pequeña o se pierde por un accidente). En estos casos, es posible reconstruir las orejas, diseñando y creando una nueva por medio de prótesis con la ayuda de cartílagos. Las primeras otoplastias respondían principalmente a este motivo por el cual se hicieron las siglos atrás.
Una particularidad de esta técnica es que es la única cirugía estética que se puede llevar a cabo en menores de 15 años. Se aconseja esperar a que el niño tenga más de cinco o seis años, edad en la que los especialistas señalan que el crecimiento de las orejas ha finalizado y cuando resulta más fácil moldear esta parte del rostro ya que los cartílagos son más flexibles que en los adultos.
La otoplastia en niños es bastante frecuente en los casos en que durante la infancia alguna anomalía en la orejas ocasiona problemas emocionales y sociales a los niños.
La infancia y la adolescencia son periodos que forjan el futuro carácter de la persona y en la que pueden aparecer numerosos complejos. Unas orejas despegadas o muy grandes pueden alterar las relaciones con el resto de niños o adolescentes y en casos extremos provocar problemas psicológicos.
No obstante, esto no quiere decir que cualquier niño que tenga las orejas grandes o de soplillo es apto para realizarse una otoplastia. La Sociedad Española de Cirugía Reparadora y Estética (SECPRE) recomiendan a los padres que estén preocupados con la forma de las orejas de sus hijos, consulten con un cirujano para que sea este quien evalúe la situación y les explique todo el proceso y los posibles resultados que pueden obtener, además de los riesgos que tendrían que asumir.
Pero lo más importante para considerar a un niño candidato para esta intervención es imprescindible tener garantías de que el pequeño desea cambiar la estética de sus orejas. Es decir, no basta con que los padres quieran que su hijo se someta a esta cirugía, sino que deben observar el comportamiento del niño para confirmar que sufre algún tipo de complejo asociado al defecto de sus orejas o que es víctima de burlas o acoso por parte de sus iguales, situaciones que pueden influir en el desarrollo de su personalidad.
Es necesario que el menor forme parte de la decisión para que se involucre en el tratamiento. Por tanto, la otoplastia pediátrica jamás debe ser una decisión impuesta al niño. La otoplastia en Málaga no se debe realizar si el niño se siente a gusto y conforme con la forma de sus orejas, aunque estas tengan alguna anomalía.
La otoplastia tiene como objetivo corregir anomalías o deformaciones en las orejas para que estén en proporción con el tamaño de la cabeza y la forma del rostro.
El tamaño de las orejas suele guardar unas determinadas proporciones en función de la edad, el sexo y la altura de cada persona. También debe guardar proporcionalidad con respecto al tamaño de la cabeza.
Según estos parámetros, el tamaño considerado normal se sitúa entre los 5,5 y los 6,5 centímetros de alto, por unos 3 y 4,5 centímetros de ancho. Para que sea más sencillo de explicar, se suele decir que en circunstancia normales el lóbulo de la oreja suele estar a la misma altura de la nariz. Asimismo, es frecuente que ambas orejas no sean simétricas ni en tamaño ni en su posición.
El postoperatorio de la otoplastia en Málaga suele ser rápido y sencillo.
Es importante destacar que esta cirugía no logra un resultado perfecto en todos los casos, porque de lo que se trata es de mejorar el estado actual de las orejas y reducir la desproporción o deformidad existente. Además, tampoco se pretende alcanzar una simetría perfecta que resultaría demasiado artificial.
Antes de someterse a una otoplastia en Málaga es muy importante compartir con el cirujano los deseos respecto al resultado final. El cirujano analizará la anomalía que se quiere corregir y las expectativas del paciente, emitiendo su opinión y aconsejando acerca de las opciones posibles en cada caso.
En la primera consulta, el especialista realizará un estudio de la posición, tamaño y ángulo de las orejas, y solventará las dudas que existan. También como parte del preoperatorio, el cirujano solicitará un estudio clínico con las todas las pruebas necesarias (analítica de sangre, electrocadiograma, etc) para comprobar que el estado de salud del individuo no presenta inconveniente alguno para la intervención.
Además, con respecto al precio de la intervención, el cirujano explicará las posibilidades de que la Seguridad Social asuma los gastos de la otoplastia. Aquí cabe mencionar que, salvo casos excepcionales, la Sanidad Pública no contempla esta técnica en su cartera de servicios.
En los días previos a la operación se prohíbe la toma de medicamentos que contengan ácido acetil salicílico y anticoagulantes, y se recomienda evitar o reducir al máximo el consumo de cigarrillos. En las horas previas a la intervención el ayuno debe ser total (ni comida ni agua).
Desde el punto de vista quirúrgico, la otoplastia en Málaga es muy sencilla. Se realiza mediante un pequeño corte o incisión en la parte posterior de las orejas, desde donde queda expuesto el cartílago. Así se puede moldear, plegar o recoger según las necesidades de cada paciente y el defecto que se desee revertir.
Es importante conocer el estado de salud del paciente antes de la intervención.
Después se sutura con puntos en el borde de la incisión. La cicatriz que queda es minúscula y permanece oculta detrás de la propia oreja, llegando a desaparecer en muchos casos. El tiempo de duración de la intervención no suele superar las dos o tres horas, salvo casos excepcionales.
Sin embargo, hay que diferenciar entre los adultos y los menores, ya que cuando se trata de intervenir a niños lo recomendable es aplicar anestesia general para evitar que el pequeño se pueda poner excesivamente nervioso durante la cirugía o sufra alguna molestia. Además, el cirujano se asegura así también que podrá practicar la otoplastia sin riesgos de que el niño se mueva y esto afecte al resultado.
El tamaño de las orejas suele guardar unas determinadas proporciones en función de la edad, el sexo y la altura de cada persona.
La gran mayoría de pacientes se recuperan en pocas horas de someterse a la otoplastia en Málaga y pueden volver a su casa. Solo en el caso de que se haya utilizado anestesia general se recomienda permanecer en el hospital o clínica durante un día, hasta que se pasen sus efectos por completo.
Esta intervención suele tener una recuperación rápida y sencilla, sin complicaciones relevantes siempre y cuando se sigan las recomendaciones del especialista. Los puntos más habituales del postoperatorio suelen ser los siguientes:
Los resultados de la otoplastia son excelentes y muy satisfactorios para los pacientes.
Los riesgos de la otoplastia en Málaga son muy bajos, siempre que la intervención la realice un cirujano plástico con experiencia y en un centro médico acreditado. En estos casos, apenas surgen complicaciones durante la cirugía o tras ella, y cuando existen son de escasa importancia.
No obstante, la cirugía de orejas no está exenta de los riesgos comunes de toda operación quirúrgica, derivados sobre todo de la utilización de anestesia, aunque como se utiliza anestesia local los riesgos son menores que en otras técnicas. Además de esta, otras complicaciones pueden ser:
Los defectos que puede corregir la otoplastia en Málaga son de muy diversos tipos.
Los resultados obtenidos con la otoplastia en Málaga suelen ser muy satisfactorios. A los cinco meses, se podrán percibir los resultados definitivos. Hay que tener presente que con esta cirugía no se pretende alcanzar la perfección ni la simetría total entre ambas orejas, ya que esto puede resultar antinatural. Lo que se busca es mejorar sustancialmente el aspecto previo a la intervención y esto se consigue con la inmensa mayoría de los pacientes.
De hecho, normalmente, aunque no es necesario en todos los casos, se suelen operar las dos orejas con el propósito de evitar una diferencia de tamaño tras la cirugía, ya que de esa forma los resultados son más armónicos y más naturales.
También hay que subrayar que en ningún caso la otoplastia afecta a la funcionalidad del oído, que en no resulta afectado por la operación. Como una de las principales ventajas de esta cirugía hay que señalar que la cicatriz resultante no es visible a simple vista, pues se ubica detrás de la oreja.
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