La artrosis
La artrosis
La artrosis es una enfermedad que produce una degeneración a nivel de las articulaciones, desgastando el cartílago. Esta enfermedad puede llevar a una limitación funcional importante y en algunos casos inluso a una invalidez que afecta a las actividades diarias. El cartílago se va desgastando y puede llegar a desaparecer. Todo esto produce un intenso dolor, síntoma característico de la artrosis. Las causas de artrosis pueden ser variadas: factores genéticos, obesidad, sobreesfuerzos motivados por actividades físicas muy intensas,...
Los síntomas aparecen paulatinamente, poco a poco. El síntoma más importante descrito por los traumatólogos en Madrid es el dolor que en una primera fase aparece junto con los movimientos y los esfuerzos de la articulación afectada; inicialmente el dolor mejora con el reposo incluso puede desaparecer. Cuando la artrosis va evolucionando y agravándose, el dolor aparece incluso en el reposo y dicho dolor se va prolongando en el tiempo cada vez más. Puede llegar dicho dolor incluso a ser constante. Dado que el dolor obliga a no realizar actividad física se puede producir de forma secundaria una atrofia muscular por la inactividad. Esta atrofia muscular empeorará la clínica de la artrosis. También es frecuente observar en la artrosis la rigidez de la articulación afectada la cual limita los movimientos de dicha articulación. La artrosis puede afectar a diversas articulaciones como las rodillas, cadera, región cervical y lumbar,...
La prevención juega un papel primordial en la artrosis, siendo la dieta sana una práctica muy recomendada por los traumatólogos de Madrid, así como la realización de ejercicio de forma regular y adecuado a la edad. También es importante en la prevención evitar en lo posible esfuerzos físicos intensos, al igual que se deben evitar determinados deportes de contacto en personas con artrosis. Por ejemplo, la artrosis de rodilla se asocia frecuentemente con la práctica del fútbol.
Para prevenir el desarrollo y progresión de la artrosis, los traumatólogos señalan la importancia de realizar ejercicios suaves, que no provoquen dolor, con la articulación afectada, pero siempre de forma moderada. En casos de enfermedad avanzada ayuda el uso de bastones o muletas, ya que disminuye el dolor. En los casos en que la artrosis afecte al dedo pulgar se deben usar objetos con mango ancho y evitar sujetar objetos con los dedos. El uso de agua caliente puede aliviar el dolor.
Los traumatólogos de Madrid destacan la importancia de la prevención de la artrosis mediante el ejercicio moderado y adecuado a la edad. En el diagnóstico de la artrosis es fundamental una buena exploración clínica. Se pueden utilizar en el diagnóstico pruebas de imagen como la radiografía o el scanner. También puede ser muy útil la astroscopia.
Para el tratamiento de la artrosis los traumatólogos usan con mucha frecuencia los medicamentos que ayudan a calmar los síntomas como los analgésicos y los antiinflamatorios, los cuales alivian el dolor y la rigidez. El gran problema de los antiinflamatorios son los efectos secundarios que pueden producir a nivel digestivo, como gastritis y úlceras. Existe otro grupo de medicamentos que ayudan a enlentecer la progresión de la artrosis como el sulfato de glucosamina.
Al margen de los fármacos la rehabilitación es muy útil. La fisioterapia alivia el dolor y disminuye la rigidez. En casos severos el traumatólogo recurre a la cirugía, siendo frecuente en articulaciones de carga como las caderas. Se usan prótesis para las articulaciones muy dañadas.